*Durante varias décadas se demolieron piezas y se permitió un crecimiento desordenado: Rojas*No se ha respetado el Plan Municipal de Desarrollo, ahora en revisión para proyectarlo al 2035* Corregir el problema llevará tiempo, pero no hay razón para que la autoridad lo se siga aplazando
por Miriam Contreras
En materia de Desarrollo Urbano, Celaya es una ciudad muy
“dañada”, consideró el presidente del Colegio de Arquitectos, Roberto Rojas,
quien agregó que algunos funcionarios han tomado decisiones equivocadas que han
deformado la imagen de la ciudad.
“Se encuentra en un estado bastante mal, bastante dañado,
que no es un daño que se hizo ahorita en estos momentos, realmente es el cúmulo
de muchas generaciones, de varias décadas, particularmente en los años 70’s y
80’s se dañó mucho a la ciudad, en cuanto a todo el desorden urbano y
arquitectónico: se demolieron piezas muy importantes de arquitectura y se
construyeron edificios que no son tan agraciados, esto dañó muchísimo la imagen
y la estructura”, opinó.
El también director de la Facultad de Arquitectura de la
Universidad de Celaya prefirió omitir los nombres de los edificios, pero
resaltó que han sido decisiones que han sacrificado la vocación de la ciudad y
afectado su belleza.
CRECIMIENTO DESORDENADO
El crecimiento desordenado de la ciudad se debió a que
aunque existían planes de ordenamiento, las autoridades no respetaron los usos
de suelo, tal y como estaban marcados, lo que ocasionó que los fraccionadores
construyeran los desarrollos habitacionales en zonas alejadas, sin servicios ni
infraestructura, y dañaran las áreas de cultivo y los espacios verdes.
Señaló que los esfuerzos de la actual administración para
corregir el problema fueron mínimos y consideró que con la actualización del
Plan de Municipal de Desarrollo 2012-2035, que está en fase de revisión, las
próximas autoridades deberán empezar a solucionar el desorden.
“Se empezaron a construir fraccionamientos sin infraestructura
y no se insertaron adecuadamente en la ciudad.
Esta administración hizo un cierto esfuerzo por mejorar un
tanto la situación, pero la verdad es que no ha sido suficiente, el daño es muy
grande y el desorden continúa. Esperamos que con la actualización del Plan
Municipal de Desarrollo mejore el orden, los planes están más o menos bien,
pero el primer plan salió en los años 80’s, estaba estructurado y pensado para
su momento, pero luego no se respetó, hubo cambios de uso de suelo que no
estaban contemplados”, dijo.
Roberto Rojas pronosticó que ordenar la ciudad será un
problema que llevará tiempo, pero no es excusa para que los gobiernos lo sigan
aplazando, sobretodo por la exigencia que ejercerán las nuevas inversiones como
la armadora Honda.
“No va a ser fácil porque está esto tan dañado, es como si
tuviéramos la casa muy dañada y sucia, no acabaríamos pronto, no se podría
componer con una sacudida. No podemos hacer caso omiso a los proyectos que
vienen, tenemos que hacer algo para reiniciar el reordenamiento de la ciudad”,
comentó.
SE DEBE EMPEZAR POR TERMINAR LAS VIALIDADES
La primera acción que enlistó el especialista es la
conclusión de las vialidades primarias de la ciudad. Dijo que se debe terminar
la construcción del segundo anillo vial y hacer una vialidad que conecte sin
interrupciones la zona norte con la sur.
Si bien reconoció que la gran limitante ha sido la falta de
recursos, opinó que la gestión debe ser ante organismos federales e
internacionales y el gasto público se debe más eficiente.
“Se debe empezar por las vialidades. Definir las vialidades
principales: no hay un eje norte-sur, ni anillos, todas las calles se cortan y
se obstruyen en algún tramo, no hay continuidad, eso es lo primero. La avenida
2 de Abril, por ejemplo, será un alivio importante en su momento y se debe
terminar el segundo anillo vial”, expuso.
A la par de esta acción, dijo que el gobierno debe
concientizar a la población de mantener las fachadas de casas y negocios con un
aspecto agradable. En este sentido comentó que se debe aplicar de forma
correcta el programa “Pinta tu entorno” y realizar otros proyectos parecidos
para hacer partícipe a la población en el tema de la imagen de Celaya.
“Se debe trabajar fuertemente en la imagen de las calles,
las fachadas, los paradas de autobuses, las banquetas, las iglesias. La parte
de los recursos siempre va a ser problema, pero si no nos hacemos el propósito
de destinarlos, menos lo vamos a lograr, se deben ordenar los mercados, la
Central de Autobuses y el transporte”, planteó.
El presidente del Colegio de Arquitectos propuso promover
los otros centros de abasto que tiene la ciudad, para evitar el
congestionamiento vial que se genera en la zona del Mercado de Abastos, y
agregó que definitivamente se debe reubicar la central camionera, por lo que
dijo, se podrían tener varias terminales de acuerdo a los diferentes tipos de
transporte, ya sea de cercanía o de largo recorrido.
EL SERVICIO DE TRANSPORTE PÚBLICO DEBE MODERNIZARSE
El arquitecto Roberto Rojas consideró que el servicio de
transporte público que ofrecen los concesionarios puede y debe modernizarse,
sin necesidad de ser más restrictivos, “se trata de hacer cumplir los
reglamentos”, dijo.
“En el transporte se debe mejorar la imagen y el servicio,
se tiene que ver con los concesionarios; es normal que defiendan sus intereses,
pero generan un desorden muy fuerte en la ciudad, y ni siquiera es eficiente ni
digno el servicio a las personas”, sostuvo.
Indicó que las ciudades metropolitanas fomentan el uso del
transporte público, lo cual permite tener calles menos congestionadas y evita
que la autoridad aplique el presupuesto destinado a obras públicas únicamente
en construir vialidades.
“Se debe planear un transporte eficiente y estimular el uso
de transporte colectivo, es mucho mejor tener uno bueno, a tener muchas grandes
avenidas para muchos carros; se debe pensar en viajar más en transporte
colectivo. Se tiene que ordenar y el gobierno tiene que hacer su papel, puede
ser un gran negocio, pero el gobierno tiene que hacer que se logre bajo los
lineamientos adecuados”, concluyó.
VIVIENDA VERTICAL
Para corregir el crecimiento desproporcionado de los
desarrollos habitacionales, el arquitecto planteó la construcción de unidades
habitacionales de forma vertical, lo cual evitaría la invasión de terrenos de
cultivo y permitiría tener más áreas verdes.
Además, consideró que los desarrolladores deben aprovechar
los espacios que existen dentro de la ciudad y no buscar predios que estén en
las orillas.
“En lugar de que se desparrame, la ciudad tiene que ser más
compacta para que ya no nos estemos comiendo las áreas de cultivo. Se deben
usar los lotes que están dentro de la ciudad, de nada sirve que yo haga un
fraccionamiento a tres kilómetros, porque vamos a dejar un área muy grande de espacio,
allí no ayuda al tejido social, eso no aporta. Nosotros como Colegio apoyamos
la vivienda vertical, pero digna; además deben estimularse programas como Pinta
tu Entorno, la gente debe concientizarse cómo su casa se ve más bonita y le
agrega plusvalía”, señaló.
DEBE EXISTIR COORDINACIÓN ENTRE DEPENDENCIAS
El arquitecto acusó a las direcciones de Servicios
Municipales, Transporte y Vialidad, Obras Públicas y Desarrollo Urbano de no
organizarse y no tomar decisiones de manera consensuada, lo cual genera imperfecciones
en las acciones.
Agregó que el gobierno municipal debe buscar a los
especialistas para validar los proyectos y evitar hacer cosas que en un futuro
generen problemas.
“Las dependencias no se hablan ni se coordinan, la
responsabilidad recae en (la Dirección de) Desarrollo Urbano, luego sucede que
ni se entera de lo que sucede, no deben trabajar tan independiente ni tan
indiferentes, debe coordinar la cabeza. Sí creemos que les ha faltado mucha
coordinación”, declaró.
Por último, el representante del gremio pidió a las
autoridades que los convoque para decidir acerca de los proyectos que se
realizarán, por ejemplo el que se ejecutará en la zona que quede libre de vías.
“Que nos convoquen para realizar este proyecto: sí estamos
muy interesados en poder participar en este tipo de trabajos, somos los que
tenemos que participar. Muchas de las obras se hacen, se ejecutan y nadie está
seguro que eso sea lo correcto, por lo menos nosotros como colegio no. Hemos
visto varias obras que no es realmente lo deseable y a nadie le preguntan. No
estoy en contra de que se hagan, porque sí se tiene que hacer, pero ¿quién dice
que están bien?; entonces nosotros como organismo colegiado tenemos la
autoridad para decir si está bien o está mal, entonces nuestra solicitud es que
los proyectos, sobre todo los importantes, tienen que pasar por el Colegio de
Arquitectos, que no se tomen decisiones unilaterales. Es un problema de
comunicación y ése es nuestro reclamo, las obras tienen que ser avaladas por
organismos que tienen expertos de decidir si es lo correcto o no”, concluyó.
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